23 de septiembre de 2012

Segunda vez

Hola, hoy es la segunda vez que te veo. La verdad es que no supe qué hacer, estaba nerviosa y completamente sonrojada.
No te saludé, no tuve el valor de hacerlo, supongo que es lo que pasa cuando te enamoras.

Estabas ahí sentado, solo, de noche. Cuánto me hubiera gustado hacerte compañía, hablar contigo y conocerte.
Pero, ¿sabes qué? Me encantó lo que hiciste, porque al levantar la cabeza me miraste, me escogiste a mí antes que a cualquier otra persona que estaba en la calle.
Para mí, fue un momento mágico y, llámalo sexto sentido o quizás imaginación, pero sé que tú te alegraste de volver a verme.

10 de septiembre de 2012

¿Por qué tiene que existir la distancia?

Aunque no lo creas, tenemos muchas cosas en común. No somos tan distintos, pero claro, tú desde el primer momento me rechazaste. No me conocías, no sabías nada de mí, ni siquiera te molestaste en intentarlo.
Cada día me levanto y miro tus fotos, soñando con que alguna vez lleguemos a vernos y veas todo lo que siento por tí. Sueño con que, por lo menos, me des una oportunidad para demostrarte cómo soy.
Pero todos los sueños, sueños son, y la mayoría se quedan en tu cama cuando despiertas. Porque por mucho que intente perseguir mis sueños, por mucho que intente perseguirte a tí, la distancia siempre estará ahí para impedírmelo.